Por Lucas de Venezia y María Celeste Colombo*
Comenzó una nueva carrera entre titanes por el liderazgo en inteligencia artificial. Así como en el siglo pasado hubo una carrera armamentística desplegada por las grandes potencias, la rivalidad actual no se da entre estados, sino entre grandes empresas tecnológicas.
Meta, Google, Microsoft, X.AI y OpenAI están inmersos en una competencia para dominar el desarrollo de los denominados grandes modelos de lenguaje (LLM- large language models), que vienen acaparando la escena tech desde la irrupción de ChatGPT.
Se trata de sistemas que utilizan técnicas de aprendizaje profundo y procesamiento de lenguaje natural, entrenados con billones de datos en formato de texto, con la capacidad de responder a solicitudes y preguntas de manera coherente.
Estos aplicativos de IA tienen la habilidad de aprender a través de las interacciones con el usuario, ajustando sus respuestas, y su característica principal es la creación de contenido a partir de datos, y como tecnología conforman lo que se conoce como inteligencia artificial generativa (IAGen).
Los grandes modelos de lenguaje, como herramientas aisladas, tienen muchísimas aplicaciones prácticas. Por ejemplo: pueden ser usados para analizar documentos, traducir textos, mejorar el estilo de la escritura, formular sugerencias, escribir resúmenes, generar un correo electrónico, explicar una película o un documento complejo, entre otras.
Sin embargo, sus dos usos principales son: atención a clientes mediante chatbots ya que pueden mantener un diálogo fluido y coherente con un ser humano de manera eficiente, y la generación de contenido, ya que permite crear textos a pedido del usuario.
La popularidad creciente de este tipo de recurso tecnológico es lo que está acaparando la atención de los gigantes de Silicon Valley, ya que los LLM serán los asistentes del futuro en todo tipo de industria.
A medida que los usuarios interactúan con los LLM ayudan a su entrenamiento e incorporan nuevos datos, lo que permite a estas empresas el acceso a grandes bases de datos e información de todo tipo.
Grok, el rival de ChatGPT que presentó Elon Musk
El paisaje artificial estaba decorado por el aporte de casi todos los colosos tecnológicos de Silicon Valley, pero faltaba el protagonismo de Elon Musk, CEO de Tesla Motors, Space X, X.AI y X (Twitter). Sin embargo, hace unos días el magnate develó su jugada maestra en el tablero de la Inteligencia Artificial Generativa.
El empresario tecnológico anunció la creación de “Grok”, un poderoso chatbot con características y particularidades distintas a las conocidas hasta ahora.
Esta nueva tecnología -según cuentan sus creadores- promete revolucionar la manera en la que interactuamos con las máquinas, ofreciendo respuestas no solo precisas sino también impregnadas de sarcasmo, un humor sofisticado e incluso una pizca de rebeldía, fiel al estilo de su creador.
Desarrollado por xAI, una startup dentro del ecosistema de Musk, Grok se presenta como un asistente de navegación capaz de surfear la vasta marea de información en línea. Desde una perspectiva distinta a la habitual, y a diferencia de sus competidores en el campo de la IA, Grok tiene acceso a información en tiempo real a través de la plataforma X (Twitter), permitiéndole así abordar temas efervescentes con suma ligereza y soltura. De alguna manera -comentan los expertos- esta IA será la que mejor “entienda” al nuevo mundo e incluso seguramente se atreva a cuestionarlo.
En el campo de batalla de la IA, ChatGPT domina la escena y sin lugar a duda ha marcado el territorio. Así, Grok se prepara para irrumpir en el mercado con una ventaja sustancial, su capacidad para procesar información en tiempo real, una característica que podría cambiar diametralmente las reglas del juego. En suma, su habilidad para comunicarse incorrectamente, de forma intencional, lo distingue de sus competidores, aportando una nota de humanidad a la interacción con la IA.
No obstante, el acceso a esta IA no será universal. En sintonía con una estrategia de exclusividad, Musk decidió que el aplicativo tecnológico solo estará disponible para los suscriptores de X (Twitter) Premium+ (cuesta 16 dólares al mes), lo que enciende nuevamente el debate sobre la democratización de la información y el acceso a la misma.
ChatGPT Turbo, la versión más avanzada
OpenAI, la empresa comandada por Sam Altman, presentó el 30 de noviembre del 2022 la joya de la corona, el ya mundialmente famoso LLM denominado ChatGPT. Pronto, la herramienta se transformó en el recurso tecnológico de moda. Convertida en la nueva sensación de internet, su uso se fue popularizando en todos los sectores, ya sea profesional, académico o educativo. En la actualidad, cualquiera puede utilizar la herramienta para encontrar respuestas a preguntas complejas o quizás las más mundanas.
Los números de ChatGPT sorprenden, apenas cinco días después de ser lanzado llegó al millón de usuarios y actualmente tiene más de 100 millones de cuentas activas.
Sin embargo, OpenAI apuesta por más: el pasado 6 de noviembre, la compañía presentó una nueva versión de su chatbot: ChatGPT- 4 Turbo es una versión mejorada de su antecesor, por ahora disponible de manera limitada pero que pronto estará abierta a suscriptores.
ChatGPT Turbo está entrenado con información de hasta abril del 2023, y por este motivo está habilitado para responder consultas sobre temas relativamente actuales.
Asimismo, tiene capacidades de procesamiento mejoradas por lo que admite hasta 128.000 tokens de contexto. El token es una unidad básica de estos modelos para calcular la longitud de texto (un token equivale a 4 caracteres en inglés o casi una palabra, 100 tokens a 75 palabras). Esto es importante, ya que ChatGPT 4 Turbo puede soportar un prompt (pregunta o instrucción) de casi 300 páginas de texto, lo que permite generar contenido más extenso, coherente y con una mayor capacidad de análisis.
Un prompt con una capacidad de contexto ampliada impacta en el resultado final generado ya que hay posibilidades de ser más específicos con la petición solicitada.
Asimismo, ChatGPT- 4 Turbo está dotada de “visión”, es decir que admite imágenes como entrada por lo que permitiría analizar imágenes al detalle y analizar documental que contenga figuras, gráficos o ecuaciones.
No obstante, el anuncio que rompe con todos los esquemas, y quizás sea la noticia del año, es el lanzamiento de GPT Builder, para que todos puedan crear su propio chatbot personalizado.
OpenAI ofrece una nueva funcionalidad que permite crear tu versión personalizada de la herramienta. Ahora se le podrá anexar toda aquella información y documentación propia para hacerlo funcional al gusto y perfil del usuario. Lo más disruptivo de este nuevo recurso es que no es necesario tener conocimientos previos de programación ya que la creación de los GPT’s se realiza desde cero utilizando lenguaje natural.
Es decir, que solo hay que indicarle a GPT Builder cuál es nuestro propósito y qué necesitamos de la aplicación. La herramienta es tan sencilla de usar que en apenas cuatro minutos tendremos listo nuestro propio GPT customizado, que no solo tiene la capacidad de analizar documentos, sino también podrá acceder a internet e incluso generar imágenes.
Los GPT’s personalizados tendrán un enorme potencial y podrían impactar significativamente en las pequeñas y medianas empresas abaratando costos.
Incluso en el ámbito legal esto podría suponer una revolución visceral y sin precedentes. En definitiva, con este nuevo avance y al permitirle al GPT personal adecuarse a las necesidades de un estudio jurídico, por citar un ejemplo, obtendremos una herramienta extremadamente potente, capaz de simplificar procesos y realizar tareas específicas, como análisis de documental o redacción de demandas, en pocos minutos.
Quizás como la frutilla del postre, OpenAI permitirá monetizar los GPT’s, así nuevas creaciones podrán ser adquiridas por otros usuarios que enfrentan los mismos dilemas, con el consiguiente beneficio económico para sus creadores.
El lado oscuro de la inteligencia artificial generativa
La suerte está echada. Los avances en inteligencia artificial generativa se suceden a una velocidad incontrolable. Lo cierto es que estos avances prometen transformar el acceso a la información tal cual lo hacemos hoy en día, potenciando así el cada vez más popular coworking (trabajo en conjunto) entre hombre y máquina. Próximamente nos veremos inmersos en un mundo donde la innovación desafía constantemente los paradigmas existentes de todas las industrias.
Entre tanta innovación y eficiencia al alcance de un click, deberemos estar preparados -además- para discernir entre la verdadera cara de las estrategias empresariales y el peligro que se cierne sobre los valiosos datos personales.
Detrás de toda carrera hay un objetivo: el de los titanes de Silicon Valley es monetizar el aprovechamiento de nuestros datos y encontraron en la inteligencia artificial generativa a un poderoso aliado.
Tal vez sea oportuno escuchar al filósofo Yuval Noah Harari cuando advierte que la inteligencia artificial generativa está redefiniendo los contornos de nuestra civilización. Y plantearnos seriamente, qué sucederá con nuestras sociedades cuando los humanos descubramos que “después de todo, no somos la cúspide de la creación”.
*Lucas de Venezia es abogado (UCA), Doctorando en Derecho (UNLZ), Especialista en Derecho e Inteligencia Artificial (Universidad de Salamanca) y docente universitario de grado (UCES y UNLZ) y posgrado (AMFJN). Miembro de la Federación Iberoamericana de Asociaciones de Derecho e Informática (FIADI).
*María Celeste Colombo es abogada (UNC). Magíster en Derecho Civil Patrimonial (UCA). Posgrado en Inteligencia Artificial y Derecho (UBA). Docente universitaria de grado y posgrado. Vicepresidenta del Grupo de Trabajo de Nuevas Tecnologías, Prevención y Seguros- AADS-AIDA Rama Argentina.