La presentación del cartel así como de los emplazamientos, de Brisa En Tu Barriola apuesta de la marca Brisa Festival por proporcionar un espacio en la ciudad a las bandas y artistas emergentes de la ciudad, para que puedan darse más a conocer, fue la excusa perfecta para acoger en La Fábrica de Cervezas Victoria al dúo madrileño (trío en directo) Merinoque venía a presentar las canciones de su recién publicado El Bosque (Altafonte, 2025) con el que dan forma a un paseo por las distintas etapas de la vida articulado a través de un conjunto de melodías pop amables y adictivas.
El ambiente en La Fábrica se proyectaba eufórico, con un lleno en su aforo y una sonrisa en los semblantes de los asistentes, que se acrecentó al conocer los nombres que darán forma a una nueva edición de esa fiesta de la música en la calle que es Brisa En Tu Barrio, que propone este año nuevos lugares emblemáticos de la ciudad (Huelin, El Palo y Teatinos además de la comarca aledaña de Churriana) y que contará con nombres ya conocidos en la escena independiente nacional como La Trinidad, Pequeño Mal, Pinocho Detective O Lord Malvoasí como con jovencísimos talentos como Sara Martos que desplegará su elegante R&B o Sara Rais con su pop acústico de raíz.
Entrando en materia con el concierto programado para tal evento, Merino no tardaron ni un segundo en meterse al público en el bolsillo con su repertorio cargado de cadencias evocadoras y sonidos cálidos y aterciopelados, que contribuyeron a generar una atmósfera positiva con canciones tan radiantes como la titular “El Bosque”, “Él Árbol”, “Un Clásico” o “El Laberinto”, gozosas recreaciones de esa experiencia que vincula momentos de crecimiento con elementos que quedan grabados como instantáneas que marcan una época de la existencia. Guitarras cristalinas, melodías vocales dulces que convierten el susurro en caricia y una secuencia hilvanada con precisión desde la niñez hasta la adultez. Es de agradecer poder asistir a un derroche tal de ganas y actitud por parte de una formación joven y con mucho aún que decir en el panorama pop nacional.
En definitiva, se trató de una noche de celebración por la consagración de una iniciativa tan necesaria y plausible por parte de un festival consagrado como es el Brisa, y que contó con una de esas bandas que dan aún más sentido a estos espacios donde poder desplegar su arte sin necesitad de grandes plataformas, priorizando la cercanía con el público y dejando que la música hable sin filtros.