Ya sea para compartir fotos y videos de un viaje, seguir una rutina de entrenamiento o disfrutar de videojuegos, muchas veces uno necesita conectar su celular a la pantalla del televisor. En esta nota, todos los trucos para hacer screen mirroring en pocos pasos.
Hay varias formas de replicar la pantalla del teléfono en la TV. En todos se precisa un elemento que cumpla el rol de intermediario entre los dos dispositivos: puede ser un protocolo inalámbrico o un adaptador de hardware.
Cuanto más avanzado sea el televisor –lo ideal es que sea un Smart TV– más simple será establecer un vínculo. En términos de ajuste, los equipos con Android también tienen una ventaja sobre los iPhone.
Enlace de alta definición
Si uno viaja con frecuencia y no sabe con qué tipo de pantalla se va a enfrentar en la pieza del hotel, la mejor opción es empacar en el bolso un Enlace de alta definición móvil (MHL).
Este adaptador, en un extremo exhibe una entrada HDMI –el cable no siempre está incluido- y en el otro, puede ser micro USB o USB-C, para enlazar con en el móvil.
El rasgo principal del MHL es la posibilidad de transmitir imagen en alta definición sin comprimir (soportar 4K y 8K) y audio envolvente. El precio depende de la calidad y el tipo de conector.
El más económico ronda los 2 mil pesos. Los que vienen con un HDMI mallado, están casi el doble. Antes de comprarlo, hay que averiguar si el teléfono es compatible con el protocolo MHL.
Algunos introducen un tercer cable para recibir alimentación eléctrica. Esta particularidad, permite ir cargando el teléfono en forma pasiva –como para que nunca se agote mientras comparte la pantalla- con una potencia de 40W.
Además, la conexión no requiere un software adicional, ya que incluye un driver que convierte la señal USB del smartphone a HDMI y viceversa, por lo que todo se realiza sin funciones externas y totalmente transparente para ambos dispositivos.
Chromecast
Si el televisor es de la vieja guardia, se le puede sumar un gadget para volverlo un poco más inteligente. El más popular de esta categoría es el Chromecast, desarrollado por Google. Se enlaza al puerto HDMI de cualquier pantalla plana.
Este accesorio circular permite ver contenido de streaming (Netflix, YouTube o HBO Max) en pantalla grande y tiene capacidad para enviar videos desde el móvil. El único requisito es que el teléfono y el Chromecast viajen por la misma red Wi-Fi. Necesita también estar enchufado a un toma.
Todos los años aparece una nueva versión del dispositivo. La más reciente incorpora el sistema Google TV para poder ejecutar aplicaciones, un control remoto para facilitar la interacción y reconocimiento de voz.
Muchos modelos de Smart TV -como Sony y Philips- vienen con el Chromecast instalado de fábrica. Lo que significa que se puede enviar la pantalla directamente al televisor desde la app de Google Home.
El modelo más básico arranca en 8 mil pesos y es Full HD. El 4K con 8GB y control, cuesta 18 mil pesos. Sus competidores directos son Fire TV Stick 4K Amazon y Roku Streaming Stick 4K.
Screen Mirroring
Para proyectar la pantalla del móvil sin la intervención de cables, los dos dispositivos que se acoplan, deben ser compatible con una función de espejo. Las más conocidas son Miracast, Digital Living Network Alliance (DLNA) y WiDi y su propósito es desterrar los cables HDMI.
El lado menos ventajoso de estos protocolos es que, como lo que hacen es duplicar la pantalla de un extremo al otro, si uno quiere enviar una serie al televisor, el móvil deberá permanecer siempre encendido.
Miracast es un estándar de comunicación inalámbrica impulsado por Wi-Fi Alliance y compatible con la gran mayoría de dispositivos portátiles. La transmisión en 1080p es muy estable, con una latencia lo suficientemente baja como para aprovechar un videojuego.
Además, soporta el cifrado WPA2-PSK, lo que quiere decir que los datos que viajan desde un dispositivo al otro, estarán protegidos contra intrusos.
Todos los móviles Android, a partir de la versión 4.2, son compatibles con Miracast. Además, el Smart TV debe estar certificado. Los modelos LG, Samsung, Philips y Sony la traen de fábrica.
Miracast funciona remitiendo el contenido a través de WiFi Direct, una tecnología diseñada para la comunicación directa entre partes y que realiza el intercambio a mayor velocidad que el Bluetooth.
Y si bien en teoría es muy competente, pese a los constantes ajustes, Miracast no ha conseguido ser un protocolo fiable y en muchas ocasiones, sin una razón aparente, no logra funcionar.
Para acoplar el teléfono habrá que encender el Smart TV y en el menú de ajustes rápidos, localizar el ícono Enviar pantalla. Su nombre varía dependiendo del modelo y fabricante. Puede aparecer como Pantalla de Cast, Smart View o Compartir pantalla.
A continuación, en un menú flotante se muestra el nombre del televisor más próximo. Al hacer clic sobre este enlace, se activa el lazo entre ambos dispositivos.
DLNA
La Digital Living Network Alliance es una asociación entre diversos fabricantes de equipos electrónicos cuyo objetivo fue definir las especificaciones que permitían compartir contenido multimedia entre equipos diferentes en una misma red.
Y aunque la alianza se disolvió hace unos años –ya que la balanza se inclina hacia los streaming de video pagos– todavía sigue funcionando en los primeros SmartTV con resolución 4K.
Este protocolo nació para establecer una comunicación con servidores multimedia hogareños, computadoras y consolas. La idea era empoderar al televisor como centro de entretenimiento.
Así, el dispositivos que tiene el contenido almacenado es designado como servidor, mientras que el resto, oficia como clientes o receptores de esa información. Es más cómodo y rápido que los viejos USB o disco rígidos que se adaptaban a los televisores.
Hay algunas aplicaciones que fueron escritas para aprovechar el protocolo DLNA desde Android. Una de las más conocidas es Kodi. Se trata de un histórico centro multimedia que permite ver contenido -canales digitales sin costo- a través de sus múltiples add-ons.
En la misma frecuencia sintonizan BubbleUPnP y LocalCast, aunque son un poco más complejas y requieren algunos pasos de configuración avanzada.
Airplay
Esta tecnología propietaria de Apple permite reproducir diferentes contenidos multimedia. AirPlay es la respuesta a Google Cast. Viene integrado en dispositivos Apple como el iPhone, HomePod, iPad y Mac. También se puede trasladar a Windows mediante iTunes.
Fue lanzado en 2004 con el nombre de AirTunes. Su última gran actualización fue a principios del 2018, cuando se lanzó un AirPlay 2 capaz de crear experiencias multiroom para repartir el sonido en varias habitaciones.
Hay algunos fabricantes de Smart TV, como Samsung y Sony que ofrecen soporte para este protocolo. También, los modelos de LG equipados con el sistema operativo webOS a partir de 2018.
El trámite no puede ser más directo. Buscar en el menú de herramientas y pulsar sobre el icono Duplicar pantalla. El iPhone reconocerá el nombre del en segundo televisor y mostrará su nombre.
Así, las opciones actuales para replicar pantalla son muchísimas. Sea con adaptadores o con poderosos equipos, el objetivo se puede cumplir de diversas maneras.