El Sótano volvió a ejercer de bunker sonoro para los amantes de los sonidos más “under”, esta vez con la visita de los aussies Las bombas de labios Belair, una de esas bandas que parecen llegar sin hacer ruido hasta que se suben a un escenario. Visitas Primavera ha acertado de lleno al traer al cuarteto, en plena efervescencia, que ha renovado cancionero con su excelente De nuevo (Registros del tercer hombre 2025).
La pequeña sala, prácticamente llena para ser martes, recibió al combo con una mezcla de curiosidad y expectación que fue despejada a medida que iban pasando los minutos. También había fans irredentos en primeras filas que se sabían los temas y bailaban todas las canciones.
A pesar del hándicap que ha supuesto el accidente de su guitarrista Mike Bradvicaobligado a tocar sentado, (también han estado a punto de suspender la gira) los cuatro, insultantemente jóvenes, salieron con ganas de reivindicarse. Y así lo hicieron, Maisie Everettla front woman absoluta, desde voz y guitarra, guio el arranque de bolo con “Again and Again” y “If You’ve Got the Time”, dejando claro que los nuevos temas funcionan incluso mejor que en estudio, más urgentes y directos.
El setlist, bastante breve, pero bien armado, provocó un viaje sin pausas innecesarias por su repertorio reciente, por ejemplo: “Back of My Hand”, o “Another World”, dejando patente que hay algo en la forma que construyen sus temas, que remite al mejor indie noventero de guitarras, pero actualizado a su propio terreno pop.
La segunda parte del concierto no hizo sino confirmar su buena forma y disposición de hacer pasar un buen rato a sus fans, a pesar del comentado avatar del destino, con temas como “Hey You”, “Look the Part” o “Price of a Man”, con un Bradvica, sentado, pero sosteniendo bien los riffs que acompañaban el motor rítmico de Jimmy Droughton y Daniel Devlinbajista y batería respectivamente.
Cerraron con “Smiling” y “Don’t Let Them”, dejando esa sensación extraña pero deliciosa de muchos conciertos cortos; “quiero más, pero quizás esto sea lo mejor para no emborronar algo bueno”.
Unos cincuenta minutos de set que dejaron claro que Las bombas de labios de Belair están en un momento dulce, con esa actitud “shoegazer” que contrasta con su música alegre, mezclando surf, indie rock (del de verdad) y punk. Emparentados con otras bandas australianas con mujer al frente y reivindicando sonidos del pasado, como Los BethThe Belair Lip Bombs son unas bombas, habrá que ver hasta donde explotan.
Fotos The Belair Lip Bombs: Fernando del Río
