cuánto cuesta instalarlas en casa y olvidarse de las llaves

En un contexto en el que la tecnología avanza hacia hogares automatizados, con termostatos y luces que se activan desde el celular, las cerraduras inteligentes empiezan a tomar mayor relevancia. Ya no se trata solo de reemplazar una tradicional por una moderna, sino de incorporar un sistema que permiten abrir una puerta con huella o tarjeta magnética, olvidándose de las llaves.

Este tipo de producto —operan con conexión wifi, Bluetooth, apps móviles y métodos múltiples de autenticación— logran imponerse por su practicidad en una casa, un departamento, una oficina o un alquiler temporal. Pero también por la seguridad y la autonomía que ofrecen frente a olvidos o imprevistos.

Una de las propuestas más recientes en este segmento es la NHS-D100, del fabricante Nexxt Solutions Home, que llegó a la Argentina con el objetivo de responder a una demanda creciente de hogares que buscan soluciones tecnológicas sin complicaciones, según explican desde la empresa.

Este modelo permite desbloquear una puerta mediante una aplicación para celulares Android o iPhone, comandos por voz, teclado digital o una llave física tradicional.

Su funcionamiento autónomo —alimentado con baterías— asegura hasta 10 meses de uso sin recarga y cuenta con un puerto USB para emergencias.

“La seguridad de casas y edificios evolucionó significativamente en los últimos años, siendo las cerraduras y accesos inteligentes un elemento clave en ese proceso”, explicó Erika Merlo, gerente de territorio para el Cono Sur de Nexxt Solutions Home.

Y agregó: “Estos dispositivos no solo ofrecen comodidad, sino que también elevan el estándar de seguridad, permitiendo un control más personalizado de los accesos”.

Una de las ventajas destacadas del modelo es la posibilidad de generar códigos de acceso temporales o permanentes, que pueden compartirse con familiares, visitas o empleados ocasionales, sin necesidad de entregar una llave física.

Además, desde la app Nexxt Home, es posible recibir alertas en tiempo real sobre quién entra o sale del domicilio, y consultar un historial de accesos con detalles sobre horarios e intentos fallidos.

Otro punto fuerte de esta cerradura es la integración con otros dispositivos inteligentes, siempre y cuando formen parte del ecosistema Nexxt. A través de “escenas” programables, es posible, por ejemplo, encender luces o activar sistemas de climatización automáticamente al desbloquear la puerta.

La instalación es sencilla, compatible con puertas de apertura lateral izquierda y derecha, y que el producto viene con todos los herrajes incluidos. Basta con conectarlo a la red wifi del hogar y configurarlo desde el celular.

Por su parte, Ezviz, empresa especializada en soluciones para hogares inteligentes, cuenta con el modelo DL05, que combina un diseño moderno con múltiples funciones de seguridad.

Esta cerradura permite el acceso al domicilio a través de múltiples formas: tarjeta de proximidad, código numérico o llave mecánica. También se puede controlar de manera remota desde la aplicación EZVIZ, ya sea por conexión Bluetooth o Wi-Fi.

No obstante, uno de los diferenciales del modelo DL05 es su sensor de huellas en el picaporte, que permite almacenar hasta 50 perfiles biométricos de manera local y activa un bloqueo de seguridad tras cinco intentos fallidos en cinco minutos. También ofrece alertas automáticas en caso de intentos de forzar la cerradura o si alguien intenta retirarla.

Además, al estar integrado al ecosistema de Ezviz, permite sincronizarse con las cámaras de seguridad de la marca, que se activan automáticamente al detectar un ingreso, sumando una capa de monitoreo visual en tiempo real.

El modelo IHUB F50 NP, de la marca Panzer, representa otra opción avanzada para resguardar la seguridad de casas y departamentos.

Diseñada para puertas de entre 35 y 65 milímetros de espesor, esta cerradura permite ser controlada por Bluetooth y wifi mediante su app de celulares, y suma diversas formas de acceso: huella digital, tarjeta RFID, código numérico, teclado táctil o llave mecánica de emergencia.

Uno de sus puntos fuertes es la capacidad de almacenamiento: hasta 200 huellas digitales, 200 tarjetas de proximidad y 150 claves, lo que la convierte en una opción ideal no solo para el hogar, sino también para oficinas o espacios con alto tránsito.

Su diseño incluye lector de tarjetas, huellas y un modo “No molestar”, pensado para bloquear el acceso o las notificaciones durante determinados momentos.

Además, cuenta con protección contra descargas eléctricas (anti shock eléctrico), y una autonomía estimada de hasta 12 meses con uso promedio de 10 accesos diarios, alimentada por cuatro pilas AA.

Otro dato a tener en cuenta está en los supuestos problemas técnicos que pueden presentar esta clase de dispositivos por sobre las cerraduras mecánicas. “Son mucho más las ventajas que tiene el equipo que los problemas que pueden llegar a darse”, señaló Marcelo González, Director Comercial de Ezviz, en diálogo con Clarín. La clave, explica, está en una correcta instalación.

La mayoría de los inconvenientes surgen cuando el producto no es colocado de manera precisa: “Requiere de medidas exactas. Si no coinciden bien los agujeros, puede haber un inconveniente en cuanto al mecanismo. Por ejemplo, si el picaporte roza con la madera, la manija queda dura y eso genera fricción y un desgaste que puede afectar a la cerradura y a la estructura de la puerta”, reconoce.

Además, al tratarse de cerraduras que en muchos casos son alimentadas por pilas, la fuerza del mecanismo es limitada: “No es la misma que uno puede aplicar con la mano. Por eso todo tiene que calzar perfecto, sin tener que hacer fuerza para cerrar o abrir”.

Lo mismo sucede con el marco: los pernos deben ingresar de forma fluida, sin fricción. “Si no, no llega a cerrar o puede trabarse, sobre todo en puertas de madera que se hinchan con la humedad o el calor”.

“La persona que la instale tiene que tener cierto conocimiento, al menos para usar un taladro, tomar medidas y entender cómo trabaja la puerta. Si una bisagra está floja o la puerta se mueve demasiado, eso también puede generar fallas con el tiempo”, agregó.

En departamentos, además, estas cerraduras digitales ofrecen una ventaja adicional: si por un golpe de viento se cierra la puerta sin llave, el usuario no queda afuera, como sí ocurre con las puertas comunes. Tampoco hace falta llamar a un cerrajero ni pagar un monto elevado por una apertura de emergencia.