Recomendaciones: DIRE STRAITS
!DESCUENTO 3%!Más vendido nº 1
Triste. Finalmente tuvieron que ser el bajista John Illsley y los teclistas Alan Clark Y Guy Fletcher, los que asistieran en 2018 al ingreso del grupo en el que militaron, Decir correaen el Salón de la Fama de Rock and Roll.
Mark Knopfler no tenía la menor intención de acudir a la gala en que se rendía homenaje a sus Dire Straits. Illsley explicó que Knopfler no tenía ganas de ir y que que sin él una actuación del grupo era imposible. Se lo pidió en varias ocasiones, y el líder le respondió que no podía hacerlo.
Mark Knopfler no dijo ni pío, no hizo declaraciones sobre su desaire al salón, simplemente no fue y punto. Pero es que los otros dos Straits originales – junto a Illsley- el hermano de Mark, David Knopsflery el batería Pick Whiters tampoco se presentaron. David alegó que el Hall hizo caso omiso de su promesa de pagar sus facturas de viaje completas. Withers no hizo comentarios.
Y al final, Dire Straits protagonizaron uno de los ingresos más tristes al salón. Por no tener, no tuvieron ni presentador, y tras 10 minutos en el escenario hablando ahí se acabó todo, no hubo nada más.
El trío subió al escenario después de la presentación de vídeo estándar de la gala. Illsley, miembro fundador, se erigió en el lógico portavoz de Dire Straits:
«Como colega, descubrí que podría ser el más calificado para hacer esto. Es un poco raro, pero la vida es extraña. Sé que es un poco extraño, pero es un honor dar la bienvenida a Dire Straits al Salón de la Fama».
El pobre no sabía casi ni qué decir. Disculpó como pudo a Mark Knopfler diciendo lo mismo de nuevo, que no tenía ganas de asistir.
«Sé que ha habido mucha especulación sobre el hecho de que Mark no esté aquí, pero puedo aseguraros que es algo personal. Son razones personales, dejémoslo así. Esto es más un grupo de personas que solo una persona, es un colectivo, una hermandad y eso es algo que debe reconocerse esta noche».
A continuación Clark le ofreció el honor a los fans:
«Este premio es para toda la gente a la que hemos hecho feliz».
Y tras eso la nada. Ni el trío haciendo una sencilla actuación con algunos músicos de apoyo, ni músicos actuales haciendo alguna versión de Dire Straits, ni nada de nada. Ni siquiera un vídeo recopilatorio de imágenes del grupo.
No se sabe si fue cosa del Rock & Rock Hall of Fame o falta de voluntad de la banda, pero la inducción de Dire Straits fue quizá la más triste que se pueda recordar en el salón.
Como si les hubieran pillado por sorpresa y les hubieran subido al escenario por la puerta de atrás.