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Los legendarios guitarristas Página de Jimmy Y Brian May han advertido sobre el potencial de la inteligencia artificial para destruir el arte y llevar a los artistas a la ruina financiera y espiritual, haciéndose eco de las declaraciones recientes de Paul McCartney, Bon jovi y muchos otros músicos sobre este delicado asunto, según informa Ultimate Classic Rock.
May ha expresado sus preocupaciones en apoyo de la campaña del Correo diario contra la propuesta de derechos de autor de la IA del Partido Laborista del Reino Unido, que permitiría a las empresas tecnológicas utilizar material protegido por derechos de autor existente para entrenar a la IA a menos que los titulares de los derechos opten por no hacerlo.
Aunque Page no hizo referencia explícita a ninguna campaña de ese tipo, ha compartido una declaración extensa y apasionada en Facebook en la que ha destacado la importancia de «defender la santidad de la creatividad humana contra la invasión de la IA» a «salvaguardar no sólo los derechos de los artistas, sino el alma misma de nuestro patrimonio cultural».
Page ha adoptado un enfoque personal en su denuncia de la IA, reflexionando sobre sus primeros días como músico de sesión y sobre la dominación mundial que ejerció como miembro de Led Zeppelin. Page calificó sus agotadores primeros días de sesión como «un crisol de creatividad, colaboración e inspiración incesante», durante los cuales «se le exigió crear y conjurar riffs y figuras líricas de inmediato sin disminuir el impulso del trabajo que se estaba grabando con los otros músicos y el artista de turno».
«Este viaje desde el anonimato del trabajo de sesión hasta los escenarios globales con Led Zeppelin no fue un camino pavimentado por algoritmos o conjuntos de datos. Fue un viaje marcado por la improvisación espontánea y la chispa incuantificable del ingenio humano. La alquimia que transformó un riff único en un himno quedó grabada en el alma colectiva de la banda, una sinergia que ninguna máquina puede emular».
Page descartó además el arte generado por IA como «ecos huecos, desprovistos de las luchas, los triunfos y el alma que definen el verdadero arte». Añadió que «cuando la IA raspa el vasto tapiz de la creatividad humana para generar contenido, a menudo lo hace sin consentimiento, atribución o compensación. Esto no es innovación; es explotación».
El guitarrista señaló que si alguien hubiera tomado su trabajo sin crédito ni compensación, «se habría considerado un robo. El mismo estándar debe aplicarse a la IA». Por lo tanto, añadió, «debemos defender políticas que protejan a los artistas, asegurando que su trabajo no sea desviado al vacío del aprendizaje automático sin el debido respeto. Celebremos y preservemos el toque humano en el arte: las imperfecciones, las emociones, las historias detrás de cada nota y cadencia».
Aunque May apoyó la campaña del Correo diario contra la propuesta de derechos de autor de la IA del gobierno británico, también expresó su temor de que sea demasiado tarde para impedir que los defensores de la IA avasallen las leyes de derechos de autor y se aprovechen de los artistas.
«Mi temor es que ya sea demasiado tarde: este robo ya se ha llevado a cabo y es imparable, como tantas otras incursiones que los monstruosamente arrogantes multimillonarios propietarios de la IA y las redes sociales están haciendo en nuestras vidas», dijo May a la publicación la semana pasada.
«El futuro ya ha cambiado para siempre».
«Pero aplaudo esta campaña para concienciar al público de lo que se está perdiendo. Espero que logre poner un freno, porque si no, nadie podrá permitirse el lujo de hacer música a partir de ahora».
